Montes Torozos y Paramos de Torquemada-Astudillo
ESPACIOS PROTEGIDOS RED NATURA 2000
Zonas de Especial Conservacion (Directiva Habitat)
Ámbito geográfico |
Ámbito |
Año de declaración |
Superficie oficial |
Castilla y León
|
Terrestre
|
2003
|
22.999,93
ha
|
Este Espacio se encuentra formado por seis áreas separadas situadas en el C y W de Valladolid y S y SE de Palencia, con una pequeña representación también en el SE de la provincia de Burgos. La parte vallisoletana corresponde a los Montes Torozos y la palentina y burgalesa a los Páramos de Torquemada-Astudillo. El paisaje dominante del entorno es el de las extensas, y planas parameras hendidas por abundantes valles de erosión y sedimentación anchos y planos con la extensa llanura cerealista y entre ambos las zonas medias o cuestas con cerros, tesos, lomas y barrancas. La topografía se va suavizando hacia occidente, desapareciendo prácticamente el paisaje de páramos en los Montes Torozos (Valladolid) y las características cuestas margosas.
Los niveles más elevados de estas parameras están formados principalmente por calizas, mientras que en las cuestas y niveles inferiores afloran margas, arenas y yesos.
Se trata de una zona muy intervenida y modelada por la mano del hombre para usos agrarios (principalmente en las zonas más llanas correspondientes a los fondos de valle y los páramos). Los escasos restos de vegetación existentes en la zona corresponden a fondos de valle, cuestas y páramos en general poco aptos para la agricultura.
Se trata fundamentalmente de manchas de monte mediterráneo, fundamentalmente quejigares y encinares, en algunos casos en formaciones mixtas con pino piñonero (Pinus pinea), y diversas comunidades herbáceas y, sobre todo arbustivas, principalmente seriales de dichos bosques; destacando las masas forestales y las comunidades vegetales ligadas a los afloramientos de yesos (conocidos como aljezares). Estas manchas de vegetación natural son las que han tratado de seleccionar para formar parte del Espacio.
Por tanto, lo constituyen formaciones de páramo y ladera, asociados a un sistema eminentemente forestal de clara vocación protectora, que se sitúa sobre suelos empobrecidos por su elevada pedregosidad. En las zonas elevadas (páramos) de los cerrales, aunque también en las cuestas, es donde se ubican preferentemente las formaciones forestales (principalmente de encinar y quejigar, pero también sabinar), generalmente de bajo porte, debido al uso que tradicionalmente se ha hecho de los mismos, esto es, el pastoreo extensivo y la obtención de leña para el consumo tradicional.
Por otro lado, las formaciones de ladera han tenido y tienen una clara vocación de protección del suelo frente a los procesos de erosión, tanto eólica como hídrica. Así en las laderas y en los suelos más pobres encontramos formaciones de pastizal-matorral y bosquetes de encina y/o quejigo (en menor medida sabinares o pinares), mientras que en las ubicaciones con menor pendiente y suelos favorables están ocupadas por cultivos agrícolas.
Finalmente señalar que en el interior de la zona más occidental se encuentra el pequeño embalse de "La Santa Espina"..
Código |
Nombre del Hábitat |
11483 |
Vegetación gipsícola ibérica (Gypsophiletalia) |
11501 |
Lagos eutróficos naturales con vegetación Magnopotamion o Hydrocharition |
11532 |
Prados calcáreos cársticos o basófilos del Alysso-Sedion albi |
11538 |
Zonas subestépicas de gramíneas y anuales del Thero-Brachypodietea |
11540 |
Dehesas perennifolias de Quercus spp. |
11542 |
Prados húmedos mediterráneos de hierbas altas del Molinion-Holoschoenion |
11577 |
Robledales ibéricos de Quercus faginea y Quercus canariensis |
11579 |
Bosques galería de Salix alba y Populus alba |
11584 |
Encinares de Quercus ilex y Quercus rotundifolia |