La Rambla de Castro ESPACIOS PROTEGIDOS RED NATURA 2000 Zonas de Especial Conservacion (Directiva Habitat)

Este espacio comprende un acantilado costero al norte de Los Realejos, de gran verticalidad en algunos tramos, flanqueado al oeste por una rasa costera en la desembocadura del barranco de Godínez (la Calera), y al este por la playa de los Roques, donde sobresalen dos roques de tamaño mediano testigos del retroceso de la costa por la erosión marina. El sector occidental está ocupado por uno de los mejores palmerales de la isla, junto a tabaibales y especies halófilas que se asientan en una zona de antiguos abancalados. Esta vegetación es, no obstante, sólo una fracción de una comunidad exhuberante que en el pasado poblaba todo el lugar, cuya belleza e interés atrajo a multitud de naturalistas a lo largo de la historia. En las zonas más escarpadas la vegetación es más pobre, limitándose a unas pocas especies, varias de las cuales están amenazadas, como el cabezón (Cheirolophus webbianus) y la siempreviva (Limonium arborescens). En los muros de las fincas de la ensenada de los Roques se conocía hasta hace poco tiempo una fuente de aguas calcáreas donde fosilizaban con rapidez moldes vegetales, sin embargo, en la actualidad está destruida. Dentro del monumento natural se ubica una casona rodeada de palmeras, -la mansión de la insigne estirpe canaria de los Castro- y las ruinas del antiguo fortín de San Fernando -construido a comienzos del siglo pasado-, que aún conserva los antiguos cañones que sirvieron para la defensa de este sector costero.

En la desembocadura del barranco, donde se iubican dichas construcciones, hay varios senderos más o menos transitados, al ser éste un lugar apacible de agradable visita. En los acantilados del Callao de Méndez se registran algunos vertidos de las urbanizaciones que llegan al mismo cantil. Por otro lado, en la pequeña ensenada más oriental, donde se encuentran los roques Grande y Chico, hay importantes cultivos de plataneras, recorridos por senderos habilitados para el tránsito peatonal de los bañistas que acceden a la playa de los Roques. En la actualidad se está restaurando la antigua mansión de los Castro, con vistas a su transformación en un aula de la naturaleza que permita dar cabida a actividades educativas.

Recientemente se han restaurado muchos de los senderos que recorren la desembocadura de Godínez, y se ha habilitado una pequeña zona recreativa en una antigua finca abandonada. Las obras de restauración continúan con actuaciones de carácter ecológico que inciden en la mejora de la vegetación, con repoblación de especies autóctonas y eliminación de otras introducidas..