Curruca hortensis (Gmelin, 1789) Nombre preferente:

Curruca mirlona

Ámbito:

Terrestre

    Origen:

    Identificador:

80927

Mundial. Migrante transahariana que en época de cría se distribuye en torno a los mares interiores del Paleártico (Mediterráneo, Negro, Caspio y Aral) y que inverna en el Sahel, el SE de Asia y la India. De las tres subespecies aceptadas, la nominal cría en el Mediterráneo occidental (España, Portugal, Francia, Italia y el Magreb, aunque falta en las grandes islas) e inverna al sur del Sahara, entre Senegal y Chad (Hagemeijer & Blair, 1997; Snow & Perrins, 1998). España.

Tiene amplia distribución en la Península pero falta en gran parte de la región Eurosiberiana, y en llanuras agrícolas desarboladas de las cuencas de los principales ríos. También escasea en el litoral mediterráneo y en la mitad oeste, quizás por defectos de cobertura. Falta también en Baleares, Canarias, Ceuta y Melilla.

Esa distribución se ajusta a lo observado en Francia, donde prefiere áreas secas de suelo calizo (Yeatman-Berthelot & Jarry, 1994). Es probable que muchos huecos del mapa se deban a una cobertura insuficiente, debido a que el canto, el mejor modo de detección, no es siempre bien reconocido a pesar de ser sencillo y distintivo. Además es de hábitos reservados, se encuentra en un hábitat de difícil observación y presenta baja densidad con territorios relativamente grandes.

Esta facilidad para pasar inadvertida ha sido señalada incluso en sitios frecuentados por ornitólogos (Langlois, 2000). Así, la cobertura obtenida en Madrid, con un buen nivel ornitológico, se estima en torno al 50% (J. C. del Moral, com. pers.) y en Cáceres, en el caso contrario, en menos del 25% (obs. pers.). Esto también explica las marcadas diferencias que muestran provincias limítrofes (por ejemplo, Almería, Jaén y Granada).

No obstante, el mapa sí refleja su distribución en las distintas regiones. Las diferencias observadas con el anterior atlas (Purroy, 1997), tanto de menor presencia (Huelva y Murcia), como de aumento (Soria, Cuenca y Aragón), podrían deberse a diferencia de cobertura. Explota una gran variedad de hábitats que tienen en común la presencia de arbolado aclarado, con o sin matorral; y se extiende desde el nivel del mar hasta los 1.900 m en Almería (Manrique, 1997).

También se ha citado en otros tipos de hábitats (Manrique, 1997; Purroy, 1997; Tellería et al., 1999; obs. pers.).

Gran variedad de medios: bosques abiertos de frondosas.Cría:encinares,alcornocales,pinares,sabinares.

Reproductor: 170.000-440.000 parejas.

No se conocen con precisión sus problemas de conservación en España ni en los cuarteles de invernada. La principal amenaza es la transformación del hábitat. La preferencia por hábitats abiertos hace que el abandono del medio rural y la recuperación de las masas forestales le perjudiquen, problema descrito en la población francesa (Yeatman-Berthelot & Jarry, 1994). La pérdida de arbolado por falta de regeneración de las dehesas, la 'seca' (enfermedad que afecta al género Quercus, en especial encinas), la expansión de grandes infraestructuras y regadíos, el abandono e intensificación de olivares, almendrales, algarrobares y el sobrepastoreo de las dehesas, también son, a priori, desfavorables.

Propuestas: - Control del uso de insecticidas. - Conservación de su hábitat característico.