Emberiza cirlus Linnaeus, 1766 Nombre preferente:

Escribano de garganta negra

Ámbito:

Terrestre

    Origen:

Nativa

    Identificador:

10907

Mundial. Distribución típicamente mediterránea, aunque se localizan pequeños núcleos reproductivos aislados en el sur de las Islas Británicas y en el SO de Alemania. En el continente europeo se encuentra presente en los países de la cuenca mediterránea, desde Portugal, España, Francia, Italia y Grecia hasta Turquía y las principales islas mediterráneas. En África se distribuye por el norte de Marruecos y Argelia.

Se han producido observaciones ocasionales en Holanda, Dinamarca, Polonia, Malta, Egipto y República Checa. La población europea (SPEC 4) se concentra principalmente en Francia, Italia, España y Turquía. España.

En la Península se encuentra presente como reproductora principalmente en la zona mediterránea y en la mitad septentrional. Cría en las Islas Baleares y en Ceuta, pero se encuentra ausente de Canarias y Melilla. Es escasa en Extremadura, provincias occidentales de Andalucía, sur de Castilla-La Mancha y Murcia.

En el norte peninsular es escasa en Asturias y norte de Cantabria. La escasez de datos en estas provincias puede ser debida, en parte, a una baja detección durante la prospección de las cuadrículas, aunque a pesar de esto se observa un aumento de la distribución respecto al anterior atlas (Purroy, 1997). Es una especie sin grandes exigencias de hábitat, lo que favorece su amplia presencia.

Las mayores densidades se encuentran en riberas de ríos, encinares aclarados, repoblaciones de pino, praderas, eriales, sabinares y hasta en grandes parques urbanos.

A grandes rasgos, durante la invernada selecciona en la península Ibérica ambientes abiertos arbolados. Entre las 22 categorías ambientales analizadas, se observó una selección positiva de mosaicos agropecuarios, bosques de riberas y bosques de planifolios, mientras que ambientes forestales, rocosos y ligados al medio acuático (natural agrícola) fueron seleccionados en una proporción significativamente baja con respecto a su disponibilidad. La presencia de agua, ambientes agrícolas y bosques deciduos también han mostrado ser variables seleccionadas positivamente durante el invierno en el centro de España (Carrascal et al., 2002). Alcanza frecuencias de aparición significativas a escala de 100 km2 con diferente configuración ambiental atendiendo al área geográfica.

En el tercio norte del país, las frecuencias de aparición más altas tienen lugar en áreas con cobertura agrícola superior a 21 km2 en cuadrículas localizadas a menos de 120 km de la costa (12-14% de los muestreos). En la mitad sur del país, la frecuencia de aparición es mayor en cuadrículas con un desnivel superior a 380 m, oscilación térmica invernal menor de 9 ºC y cobertura de olivares mayor de 3 km2. En el archipiélago balear, donde aparece en el 9% de los muestreos, las máximas abundancias relativas tienen lugar en áreas con temperatura media invernal menor de 12 ºC.

Los mosaicos agropecuarios de elevado grado de fragmentación, en los que generalmente concurren los ambientes anteriormente descritos, (62 aves/km2), junto con los cultivos de secano (23 aves/km2), son los ambientes que albergan sus mayores densidades peninsulares. En la región central de la península Ibérica, las mayores abundancias se alcanzan en bosques de frondosas y en riberas del piso Supramediterráneo, así como en eriales, pastizales y cultivos arbolados del piso Mesomediterráneo (Molina en Del Moral et al., 2002). Por ejemplo, en la sierra de Gredos se han estimado densidades de 52 aves/km2 en olivares y de 84 aves/km2 en zonas de campiña (Sánchez, 1991).

Sin embargo, en campiñas de tierras bajas de Madrid la densidad fue considerablemente menor (24 aves/km2), mientras que en eriales de esta región se estimaron densidades de 3,3 aves/ km2 (Carrascal et al., 2002). En campiñas costeras se han estimado densidades de 11 aves /km2 (Tellería y Galarza, 1990). En los bosques de ribera, matorrales y encinares, donde la especie alcanza mayores densidades durante la época de cría (Infante en Martí y Del Moral, 2003), las densidades son menores en invierno (entre 5 y 10 aves/km2).

Esta selección de hábitat es análoga a la mostrada en Inglaterra, donde el escribano soteño selecciona durante el invierno campos con rastrojos en barbecho y sus márgenes donde alimentarse (Evans y Smith, 1994). De hecho, el declive de la población inglesa en la década de los 90 del pasado siglo se debió a cambios en los sistemas agrícolas, al reducir la superficie de rastrojos en campos de cereales, herbazales y abandono de tierras arables, corrales y trillas (Evans et al., 1997). El control de herbicidas aplicados y la retención de rastrojos con semillas durante el invierno han resultado prácticas de gestión agrícola fundamentales para recuperar la población reproductora (Ovenden et al., 1998, Peach et al., 2001).

Reproductor 500.000-800.000 parejas.

Según un estudio realizado por la Royal Society for the Protection of Birds (RSPB) en Inglaterra (Gregory et al., 2001), su fuerte declive se ha debido a diferentes factores como: la pérdida de alimento en época invernal, pérdida de presas potenciales para los pollos debido a insecticidas, pérdida del hábitat, molestias humanas durante la época reproductora y condiciones meteorológicas adversas, como heladas o fuertes nevadas. En España parece no acusar aún estas amenazas detectadas en las poblaciones británicas.

Propuestas: - Conservación del hábitat, especialmente sotos ribereños, así como setos cultivados y en campiñas.