Heliotropium curassavicum L. Ámbito:

Terrestre

    Origen:

No nativa

    Identificador:

5109

Se trata de una especie procedente del continente americano, aunque no existe consenso sobre su región concreta de origen. Según VALDÉS & DÍEZ, se distribuye de manera natural desde Estados Unidos hasta Chile.

Florece de junio a octubre. Se reproduce tanto por semilla, especialmente en sitios abiertos, como vegetativamente mediante rebrotes de raíz. La germinación se produce durante los meses lluviosos (noviembre a junio). En general, la biología de la especie esta determinada en gran medida por los factores relacionados con la alocación de recursos a la raíz.

Más del 60 % de la biomasa seca se aloca a las raíces, lo que permite la acumulación de reservas para la generación de yemas, rebrote y emergencia de tallos aéreos después del periodo de dormancia. Esto demuestra la capacidad de las raíces para funcionar como órganos reproductivos. El grado en el que Heliotropium curassavicum se reproduce vegetativa o sexualmente está relacionado con los ciclos de temperatura, humedad edáfica, apertura y grado de perturbación del hábitat, y con la profundidad a la que quedan enterradas las semillas.

La especie muestra una elevada plasticidad autoecológica, pudiendo mostrar tanto comportamiento “r” como “k”.

Coloniza suelos salobres perturbados en zonas costeras, tanto en ambientes humanizados (alcorques, jardines, solares) como seminaturales (desembocaduras de los ríos, áreas deltaicas). Generalmente aparece en suelos pesados mal drenados, periódicamente inundados y compactados por pisoteo.

Por el momento no parece generar problemas de conservación en los ecosistemas naturales españoles, pese a estar presente en algunos espacios protegidos de gran valor, como el Parque Natural del Delta del Ebro, donde es muy abundante, o el Parque Nacional Marítimo- Terrestre del Archipiélago de Cabrera. No obstante, la simple existencia de poblaciones de esta planta en lugares como las desembocaduras de los ríos de zonas cálidas, ya supone la aparición de una red de interacciones ecológicas ajenas al ecosistema nativo. Se trata, además, de una planta tóxica.

A [Tabarca], AL, B, CA, CS, GC [Fu], GI, H, MA, MU, PM [Mll, Mn, Ib, Formentera, Cabrera], SE, T, V. Tendencia demográfica expansiva.

En los casos de invasiones incipientes y localizadas puede ser suficiente la aplicación de métodos manuales de control, aunque incluyendo el desenterrado completo de las raíces para evitar rebrotes, y la vigilancia y repetición de las actuaciones hasta agotar el banco de semillas que pudiera existir en el suelo. En áreas de escaso valor ecológico, pueden emplearse herbicidas (glifosato, paracuat, etc.), siempre con las debidas cautelas. No se tienen referencias de posibles bioagentes utilizables en programas de control biológico.