Buddleja davidii Franch. Ámbito:

Terrestre

    Origen:

No nativa

    Identificador:

2804

Se trata de una especie originaria de China central y del Tíbet.

Florece de junio a noviembre. Polinización entomófila por medio de lepidópteros. Se reproduce principalmente por semilla, de dispersión anemócora, aunque los esquejes enraízan bien. Tiene capacidad para rebrotar de raíz después de sufrir cortes o talas, o bien tras la muerte de la parte aérea por efecto de las bajas temperaturas.

Presenta un crecimiento rápido y vigoroso. La producción de semillas es muy variable de unos cultivares a otros, pudiendo llegarse a las 40.000 semillas por racimo en el caso del cultivar “Potter’s Purple”. Tolera las atmósferas contaminadas de las grandes ciudades.

Su expansión se ve favorecida por la eliminación de la cubierta vegetal natural y por las obras de canalización de los ríos debido a su acción destructora sobre la vegetación preexistente.

Hábitat en su área de distribución natural - Habita en taludes, matorrales y cascajos fluviales, entre 600 y 3.000 m de altitud. Hábitat en su área de introducción - Riberas fluviales. Márgenes de carreteras. Zonas alteradas y escombreras.

Ambientes ruderales degradados. Zonas ajardinadas.

Sobre el hábitat: abunda en hábitats perturbados a baja altitud del norte de la Península Ibérica, sobre todo en escombreras y llanuras aluviales, ocupando terrenos antaño pertenecientes a los dominios de la vegetación riparia (en especial saucedas). Sobre las especies: compite con las especies autóctonas. Sobre los recursos económicos asociados al uso del patrimonio natural: puede impedir el acceso a los ríos. Sobre la salud humana: no se han descrito.

A, B, BI, CS, GI, HU, L, NA, O, SA, SG, SO, SS, T, VI. Tendencia demográfica expansiva.

Introducida de forma voluntaria como especie ornamental.

Una vez introducida, se expande de forma natural (semillas de dispersión anemócora e hidrócora).

Propuestas - Evitar su empleo en jardinería en las zonas de riesgo, pudiendo sustituirse por otras especies que no manifiesten carácter invasor, o mejor aún por especies autóctonas. - En el Reino Unido se ha recomendado a los jardineros podar anticipadamente en otoño, cortando las inflorescencias, para no dar opción a la diseminación de las semillas, aunque esto puede aumentar el riesgo de sufrir daños por helada (Sanz-Elorza et al, 2004). - Entre las medidas activas, prácticamente sólo se han aplicado las de tipo mecánico, consistentes en el arranque de plantas jóvenes, corta o tala de ejemplares adultos y desenterrado y retirada de raíces para evitar rebrotes (Sanz-Elorza et al, 2004). - Según los trabajos llevados a cabo en distintos parques de Nueva Zelanda, la poda de estas plantas hace que rebroten con más vigor, empeorando la situación, por lo tanto no se debe realizar a no ser que vaya acompañado de tratamiento químico.

Por otra parte, esta planta produce gran cantidad de semilla y es una competidora eficaz en terrenos alterados o perturbados. Debido a estas dos características, la retirada manual tampoco es efectiva. Por ello, se desaconseja técnicas de control mecánico debido al peligro que implican, a no ser que se pueda repoblar la zona con especies deseables en un breve periodo de tiempo.

- En lo que respecta a los métodos químicos de control, pueden emplearse los productos habituales contra especies leñosas, como picloram, picloram + 2,4-D, glifosato, triclopir, etc. En Hawai, tras ser cortada esta especie, fue tratada con éxito mediante aplicaciones basales con al siguiente mezcla: 1 litro de agua, 5 g de un producto con metsulfuron metil al 60%, 0,5 litros de un producto con glifosato al 36% y 2,5 ml de surfactante (Sanz-Elorza et al, 2004). - Por el momento, no se han señalado posibles agentes adecuados para su empleo en lucha biológica.

En Nueva Zelanda se esta desarrollando un programa para estudiar las posibilidades de control biológico de esta especie. Uno de los agentes usados es Cleopus japonicus (Coleoptera, Curculionidae). Los daños causados por este insecto reducen significativamente la longitud del tallo y la cantidad de biomasa, conduciendo eventualmente a la muerte de la planta.

Se esta probando también con Mecyslobus erro. Desarrolladas - No hay datos Estrategias, Planes y/o Proyectos de Gestión/Control/Erradicación: - No hay datos Dificultad de control - Según los intentos realizados en distintos parques de Nueva Zelanda, se puede afirmar que el control mecánico de esta planta es una tarea difícil y que no suele resultar efectiva.