Curruca sarda (Temminck, 1820) Ámbito:

Terrestre

    Origen:

    Identificador:

80945

Mundial. Endémica de algunas islas del Mediterráneo occidental; las principales poblaciones reproductoras se encuentran en Córcega, Cerdeña y Baleares. Tradicionalmente ha sido considerada como especie politípica, con dos subespecies, la nominal, de las islas Tirrénicas, y balearica, de las Baleares. Sin embargo, una reciente y pormenorizada revisión del género Sylvia concluye que ambos taxones han alcanzado ya un nivel de diferenciación fenotípica y genética (vocalizaciones, biometría, coloración del plumaje y partes no emplumadas) propio de especies distintas (Shirihai et al., 2001).

España. Presente sólo en las Islas Baleares mayores, salvo Menorca, y en algunas islas menores (Cabrera, Dragonera). Está estrechamente ligada al matorral mediterráneo, y evita otros ambientes como los agrícolas o los forestales (encinares).

Su hábitat óptimo es el matorral bajo de brezo, jaras y romero, aunque también está presente en matorrales más desarrollados (acebuchares, sabinares) y con cobertura arbórea de pino carrasco. En la sierra de Tramuntana de Mallorca (hasta los 1.200 m de altitud) ocupa asimismo las extensas praderas de carcera (Ampelodesmos mauritanica), resultantes en gran medida de la explotación histórica del encinar.

Matorrales mediterráneos,terrenos algo abruptos con manchas de vegetación mediterránea.

Reproductor: 14.000-25.000 parejas.

A pesar de su reducida área de distribución global, el único problema serio que parece afectarle es la alteración definitiva del hábitat por urbanización o cultivo. Así, en Mallorca, sólo está ausente de la zona central de la isla, destinada mayoritariamente al cultivo de secano, y de las zonas costeras más alteradas por la urbanización. Los incendios forestales de matorral y pinar no la afectan más que momentáneamente en el caso de los matorrales y, en el de los pinares, incluso la pueden beneficiar a medio plazo, al simplificar la estructura de la vegetación y propiciar la aparición de matorrales bajos, su hábitat óptimo. La legislación balear de protección urbanística y de conservación de la naturaleza en la actualidad garantizan su supervivencia.

En Baleares está catalogada en situación de Riesgo menor, casi amenazada (Mejías & Amengual, 2000). La interacción con la especie ecológicamente más similar, la Curruca Rabilarga, que ha colonizado el NE de Mallorca muy recientemente (Sunyer, 1998), podría implicar exclusión espacial, aunque en estos momentos no hay evidencia alguna, y parece que hay que considerar la segregación ecológica (ligeras diferencias en la selección del hábitat y en el comportamiento alimentario) como hipótesis más probable (Martin & Thibault, 1996).

Propuestas: - Protección del hábitat. - Estudio de la competencia con la curruca rabilarga.