Narcissus minor L. Ámbito:

Terrestre

    Origen:

Nativa

    Identificador:

6523

Entendido en sentido amplio (incluyendo los taxones subespecíficos) se trata de un endemismo del N y NO de la península Ibérica, desde la Jacetania y Pirineo occidental hasta las sierras de Francia y Estrelha, en la parte más occidental del Sistema Central. Puntualmente aparece en la parte francesa del Pirineo occidental. En cuanto a los taxones subespecíficos, N. minor subsp.

asturiensis es endémica del O de la Cordillera Cantábrica, Montes de León y parte O del Sistema Central, y N. minor subsp. minor es endémica de la mitad oriental de la Cordillera Cantábrica y del Pirineo Occidental.

Planta hermafrodita, principalmente alógama, con polinización entomófila. Se han descrito como polinizadores potenciales o visitantes varias especies de los géneros Anthophora y Bombus. Produce una flor por escapo. Cápsulas con semillas numerosas, de dispersión principalmente barocora, aunque la presencia de estrofilo sugiere también dispersión mirmecocora.

Presenta reproducción vegetativa por división del bulbo.

Se trata de un taxón de gran plasticidad ecológica (pastos petranos, repisas de roquedos, cervunales y pastos húmedos, piornales y brezales más o menos abiertos, orlas y claros de hayedos, robledales, marojales y encinares…) y altitudinal, aunque prefiera los ambientes montanos entre 750 y 2.150 m. En cuanto al sustrato, habitualmente suele aparecer sobre calizas. Las comunidades en las que participa son los siguientes: pastos basófilos de la Clase Festuco-Brometea erecti, cervunales de la Clase Nardetea strictae, y bosques de las Clases Querco-Fagetea y Quercetea ilicis y sus matorrales de sustitución.

La extensión de presencia conocida supera los 29.000 km² y, aunque el área de ocupación real es inferior, las poblaciones suelen estar formadas por varias decenas de miles o incluso millones de ejemplares. En las poblaciones visitadas predominaban los ejemplares reproductores, siendo más escasos los juveniles o los vegetativos.

En general no precisa de medidas concretas para garantizar su conservación, más allá de las relativas al mantenimiento o mejora de su hábitat en alguna de las poblaciones, la regulación de la recolección de flores y bulbos en las comunidades autónomas en las que no se considere prioritaria, la inclusión en el catálogo de especies amenazadas de Navarra, la mejora de la información relativa a las poblaciones cántabras, y la conservación ex situ de material que represente de forma adecuada la diversidad genética del taxón.

Los riesgos más significativos derivan de los cambios en los usos, que pueden afectar a las características del hábitat (sobrepastoreo, matorralización, creación de pistas, construcción de parques eólicos…) y la recolección intencionada de flores o bulbos. Aun así, teniendo en cuenta el número y el tamaño de poblaciones y la disponibilidad del hábitat potencial a lo largo de su área de distribución estas presiones no suponen actualmente un riesgo inminente para la supervivencia de la especie.

En Palencia y Asturias se han recogido nombres populares, todos ellos usados también para otras especies del género, pero ningún uso.

En Navarra no está incluido en ningún catálogo de protección pero sí está considerada como “prioritario” para la conservación, mientras que en Castilla y León está considerado como de “prioridad baja” debido a su abundancia. En Cantabria se ha considerado que no se cuenta con información suficiente para evaluar su situación actual. La gran mayoría de las poblaciones se encuentran dentro de espacios naturales protegidos (P. Nacionales, P. Naturales, ZECs…). En el Jardín Botánico de Olarizu (Vitoria-Gasteiz) se conservan semillas procedentes de los montes de Vitoria (Araba/ Álava, País Vasco).