Genista hispanica L. Ámbito:

Terrestre

    Origen:

Nativa

    Identificador:

4892

Endemismo del sur de Francia y España, en donde se encuentra en la mitad este y el centro norte.

Florece de mayo a julio.

Vive en orlas de encinares y hayedos, sobre calizas, hasta 1900 m.

Otra genista espinosa que se ha utilizado como pasto en La Rioja y Cantabria , donde también se llegó a recolectar para dársela en invierno a los caballos y se la considera una buena planta melífera. También destaca por sus propiedades medicinales. En Valencia se preparaba un emplasto con la parte aérea contra los hematomas y en Castellón se hacía un emplasto similar y se colocaba sobre el estómago como antiflogístico en las “inflamaciones de estómago”. Contra las infecciones cutáneas sin herida, se aplicaban baños de piel con la decocción de la parte aérea junto con árnicas (Arnica montana L., Inula montana L. y especies afines).

En Huesca se ha utilizado en veterinaria popular para favorecer el parto y ayudar a expulsar las parias atando un manojo a la cola del animal o sujetándolo en el lomo. Según dicen, presenta la “misma virtud que la ruda, pero es más floja que ella”. A pesar de su interés pascícola, en Castellón se considera venenosa para el ganado cuando se moja por la lluvia o el rocío.

Además se ha empleado como leña y para chamuscar al cerdo. En Asturias se considera una mala hierba de los prados contra la que hay que luchar. En la comarca cántabra de Campoo indican que como ya no hay vacas ni ovejas, se está extendiendo mucho y está colonizando las laderas.